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Vivencias y reflexiones
El despertar
Después de la noche oscura del alma, a través de la redención, preguntándole a Dios, al universo infinito… ¿¡tiene que haber otra forma de ver las cosas!?, aparece el despertar, como nueva percepción y nuevo paradigma en el camino del desarrollo de consciencia y espiritual.
Somos responsables de despertar, ser conscientes y pasar de preocuparnos tanto a ocuparnos.
Ser el artista de tu vida, no la víctima
El mejor regalo de mi vida: la enfermedad y el sufrimiento como oportunidad para descubrir y enfocarme en la parte buena.
Poniendo la atención y foco en lo que quieres que sea tu vida, no en la enfermedad ni en el problema, si no en todo lo positivo bueno y en la solución.
Conseguir tu capacidad creadora y pasar desde la enfermedad hacia la abundancia.
Con mi gran regalo, al vivir la autocuración en mi momento de enfermedad, y al cambiar el foco, la energía y la percepción a creadora, preguntándome: ¿Para qué me ha pasado esto? en lugar de victimista: ¿Por qué me ha pasado ésto?
Descubrimos que somos un mundo más fuerte de lo que pensamos. No sabes lo que es ser lo suficientemente fuerte hasta que solo sea la única forma de verlo.
Existe un mundo de posibilidades infinitas y si existen: ¿por qué vivimos presos desde la negatividad y sufrimiento?
Nuestros enemigos son la desconexión espiritual, la falta de propósito profesional y personal, la monotonía y el piloto automático.
La clave es dejar de estar encadenada en el victimismo y transcender a la abundancia, creando mis circunstancias de forma intencionada.
El problema de la desconexión espiritual es que te centras en el tener, no en el ser, porque miras desde la escasez.
Para atraer abundancia, hay que centrarse en lo que eres, no en lo que tienes.
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